Desde hace un par de años, Robert Pattinson arrastra una corte de seguidoras ávidas de fotos y autógrafos allá donde va, y no le hace demasiada gracia. El actor ha afirmado que la fama es "un monstruo" que le encasilla en un papel y está dispuesto a hacerle desaparecer si no protagoniza éxitos de taquilla.
   Ser el protagonista de Crepúsculo ha hecho de Robert Pattinson un joven rico y famoso, pero a él no acaba de gustarle su nueva posición. La fama por su papel de Edward Cullen podría encasillarle como 'guapo oficial' y no permitirle avanzar como actor, y el joven no duda en quejarse de ello.
   "Es como un monstruo", ha declarado a la revista OK!. "Cuanto más te conoce la gente, más te identifican con un papel en concreto. La gente siempre me pregunta si temo encasillarme".
   Lo cierto es que no quiere que le clasifiquen, pero lo que más le preocupa es la exigencia de convertir en oro todo lo que toca, pues de lo contrario teme ser desechado como un producto obsoleto.
   "La gente juzga tu trabajo y si no está generando dinero se ponen en plan: 'Está acabado'. Si quieres hacer algo que sea bueno, tiene que ganar Oscars", ha explicado Pattinson.
   El joven pone como ejemplo a otros actores que sí han buscado la posición que tienen, mientras que a él le vino de repente y le hubiera gustado haber seguido otro camino.
   "Leonardo DiCaprio fue nominado a un Oscar muy joven y siempre ha querido ser actor, su fama es justificable", afirma Pattinson. "Yo estaba haciendo películas pequeñas independientes. Simplemente acabé en la actuación".